Historia del caso
En el otoño de 2020, 12 apartamentos de creyentes pacíficos en Nizhnekamsk fueron invadidos por agentes del FSB y la policía antidisturbios. La investigación inició una causa penal en virtud de un artículo por extremismo. Los motivos eran que las fuerzas de seguridad “revelaron las prácticas utilizadas por la organización religiosa de los testigos de Jehová”, como cantar canciones religiosas y rezar. Desde agosto de 2021, Dmitry Yarchak, que padece parálisis cerebral, así como Denis Filatov y Stanislav Klyuchnikov están bajo acuerdo de reconocimiento. Su caso llegó a los tribunales en enero de 2022. Varios testigos declararon que habían declarado ante el investigador bajo presiones y amenazas de las fuerzas de seguridad, y una mujer denunció que el investigador había escrito arbitrariamente en el protocolo palabras que ella no había dicho. Parte de la acusación se basó en el testimonio de un testigo secreto. En septiembre de 2023, el tribunal condenó a Filatov, Klyuchnikov y Yarchak a 6 años de prisión en suspenso, y en diciembre el recurso confirmó esta decisión.