Un testigo en el caso Suvorovs de Chelyabinsk se convirtió en acusado. Pavel Popov estará en el banquillo de los acusados por su fe

El 18 de mayo de 2021, agentes de seguridad registraron la casa de Pavel Popov, de 44 años, de Yemanzhelinsk, una ciudad a unos 40 kilómetros de Cheliábinsk. El creyente fue detenido, pero luego liberado bajo acuerdo de reconocimiento. Se inició una causa penal en virtud de la parte 1 del artículo 282.2 del Código Penal de la Federación de Rusia (organización de actividades extremistas).

A las 7:00 de la mañana, los oficiales de la Guardia Rusa llamaron fuertemente al apartamento de los Popov y ordenaron abrir la puerta. Pusieron a Pavel contra la pared con las manos en alto. Más tarde, el investigador permitió que el creyente se moviera libremente por su apartamento. El registro de 5 horas se llevó a cabo en presencia de testigos que dijeron ser estudiantes de la facultad de derecho y futuros oficiales de policía. También se examinaron el garaje y el coche de Pavel. Las fuerzas del orden incautaron los teléfonos, tabletas, computadoras y el certificado de registro de un automóvil de los Popov, que, según el investigador, sería una prenda en caso de multa para el creyente.

Después del registro, toda la familia Popov, incluida su hija de 13 años, fue llevada al Comité de Investigación de Cheliábinsk para ser interrogada. El investigador Aleksandr Chepenko familiarizó a Pavel con los materiales preliminares del caso penal iniciado el 22 de abril de 2021. Los documentos resultaron ser muy similares a los materiales del caso de otra creyente de Chelyabinsk, Valentina Suvorova. Pavel no se considera culpable de un "crimen" por el simple hecho de practicar la religión.

Hace dos años, el 26 de marzo de 2020, Pavel Popov ya fue registrado, pero tras ser interrogado fue puesto en libertad. El caso penal actual contra Popov fue separado del caso de Valentina Suvorova, quien fue sentenciada a 2 años de libertad condicional por su fe. También en Cheliábinsk, Vladimir Suvorov y Dmitriy Vinogradov son perseguidos por su fe.