En la foto: Hasan Kogut con su esposa fuera del juzgado. 10 septiembre 2020
Hasan Kogut, un creyente de Beryozovsky, fue condenado a dos años y medio de prisión condicional por participar en reuniones con otros creyentes
Región de KemerovoEl 10 de septiembre de 2020, el Tribunal de la ciudad de Berezovsky, en la región de Kemerovo, dictó un veredicto de culpabilidad contra Hasan Kogut, de 37 años y padre de un menor de edad. El creyente fue sentenciado condicionalmente a dos años y medio con un período de libertad condicional de dos años. Negó rotundamente la acusación de extremismo y afirmó que había sido condenado por su fe.
"30 estados condenan abiertamente la persecución de los testigos de Jehová y esperan que este malentendido termine pronto. No voy a renunciar a mi fe en Jehová, y obligarme a hacerlo es un crimen", dijo Hassan Kogut en una declaración final ante el tribunal, subrayando que no está siendo juzgado por delitos sino por creencias religiosas.
La jueza Elena Bigeza, tras escuchar los argumentos del creyente, lo condenó a pena condicional, aunque el fiscal pidió 2 años de colonia para Kogut.
El 22 de julio de 2018 se registró la casa de un residente de Berezovsky Hassan Koghut. Pero no fue detenido hasta el 6 de febrero de 2019, el mismo día en que el departamento regional del FSB abrió una causa penal contra él por su participación en actividades extremistas. Inmediatamente después de su arresto, Kogut fue puesto en un centro de detención durante 2 días, y más tarde, durante 202 días bajo arresto domiciliario. Luego, el tribunal relajó su orden de restricción hasta que firmó un aviso de no irse.
Según el expediente del caso, Hassan Koghut se reunía con sus compañeros creyentes para reuniones religiosas, "continuando" las actividades de una entidad legal, una organización religiosa prohibida. Al hacerlo, un creyente "cometió un crimen deliberado contra los cimientos del orden constitucional y la seguridad", según la acusación.
El juicio de Hassan Kogut duró más de un año. Durante ese tiempo, muchos testigos declararon que no habían escuchado a ningún creyente llamar al odio, la violencia o los eslóganes contra el Estado, ninguno de los cuales figura en la legislación sobre la lucha contra la actividad extremista. La presencia de extremismo en las palabras de Kogut analizadas durante las sesiones judiciales también fue negada por el experto Vadim Shiller de Kemerovo.
"El curso del proceso indicó que las fuerzas del orden actúan sobre la base de información errónea sobre los creyentes. Por ejemplo, en su discurso la fiscal del estado afirmó que los testigos de Jehová inventaron la doctrina del infierno como lugar de tormento para los pecadores, aunque entre las religiones cristianas son los Testigos los que niegan la existencia del infierno de fuego. Este matiz es un indicador de cómo las fuerzas del orden en general tratan los hechos, si hablamos de los casos penales contra los testigos de Jehová", comentó sobre la sentencia el representante de la Asociación Europea de Testigos de Jehová, Yaroslav Sivulsky.
El caso de Hasan Kogut se separó del caso de otros creyentes de Berezovsky, Vadim Levchuk y Sergey Britvin, que fueron enviados a la colonia durante 4 años por el tribunal el 2 de septiembre de 2020, sobre la base de cargos similares.